Feeling alive.

Caminaba lentamente por un sendero marcado por la tierra. 

La brisa recorría cada lugar de su cuerpo, volaba sus cabellos rubios despeinandola. 

Pasaba su mano por los yuyos, y lo sentía. 

Conocía ese sentimiento de antes, pero ahora lo vivía con mayor alegría que nunca. 

Sus manos seguían algo frías, pero ya era normal. 

Estiraba sus dedos entre la hierba viendo como el verde del pasto hacía juego con el color de sus ojos.

Tomo aire, volvió a respirar una vez más para asegurarse. Y lo sabía, estaba viva.