jueves, diciembre 22

Siempre tenemos una opinión para todo.

Si no fuese quien soy, si pudiera cambiar mi forma de ser, si solamente se pudiera retroceder el tiempo. Todo seria mucho más simple. No necesitaría pensar las cosas una y otra vez antes de hacerlas y/o decirlas.
Todos creíamos que al juzgar a una persona por si tiene buenas notas es decir que es un traga o que sabe mucho. Que si te besaste a muchos chicos sos una putta o sos una piba que sabe bien lo que qiere. Que si no besaste a ninguno sos una santa o sos una idiota. Que si sos muy callada seguro que después puteas a todos por detrás o en serio te gusta escuchar al resto antes de hablar. Que si hablás mucho, sos una pesada o sos una persona demasiado social. Que si sabés todo lo que pasa, sos una chusma o sos alguien que sabe guardar secretos y por eso te cuentan todo. Que si no entendés que pasa, sos una colgada o no te importa nada y nunca escuchas a nadie. Que si molestas a alguien, es porque sos una envidiosa & queres lo que el otro tiene o porque el otro te molesto antes.
Siempre hay dos opciones, una buena & otra mala, siempre tiene que haber una crítica, nunca podemos dejar que solamente las personas sean lo que son sin juzgarlas aunque sea una vez, nunca dejamos pasar una. Cuando se trata de chances, no dejarla pasar es bueno, pero, cuando es sobre personas... ¿Es bueno siempre tener algo para decirle? ¿No podemos simplemente callarnos la boca y dejar que sea como es? Parece que no.

2 comentarios:

  1. Cuanta razon tenes! Me encanto lo que escribiste, yo por mi parte creo que ningun exeso es bueno, en vez de ser todo tan blanco y negro tendria que ser gris tambien, besitos!

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  2. A VECES CUESTA MUCHO CERRAR LA BOCA, LO DIGO POR QUE ME PASA.
    Te invito a pasar por mi blog http://algoquizas.blogspot.com/
    Un beso!

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xoxo, Lali.