No creo en navidades, ni en las noches de paz.
Las verdades no son absolutas y hay mentira y verdad.
Hoy dormis en mis brazos y eso es una verdad; hoy no entiendo cómo paso todo pero me cabe igual.
A las fiestas las inventa un sabio, a las ceremonias los que no sabian que hacer,
Tu cuerpo es el lugar perfecto para que yo sepa lo que quiero hacer.
Como noches de magía, como noches de sal; las verdades son tan irreales como la realidad.
Aquel tesoro con dueña hoy es mi perdición, más con la misma Luna me duermo y despierto el mismo Sol.
A la noche la hicieron los sabios, al día los que querían saber; la cama es el lugar perfecto para que te explique lo que paso ayer. Porque ayer yo vi todo, todo lo que pude ver. La cerveza, tus ojos, tu rezo, la locura en tu piel.
¿Para qué hacer recias las sensaciones? Hoy no quiero indagar corazones, ni hacer juicio por retrivisión. Si vos sos el paraíso.
Yo no creo en milagros, pero, ¿qué le voy a hacer?